Los primeros finalistas del memorial Goñi de este año 2025 han tomado su lugar en el frontón Beloki de Zumárraga tanto en categoría promesas como en senior.
Dentro del duelo del Cuatro y Medio que jugaron en categoría promesas, Oihan Etxeberria (Oiarpe) fue quien validó el primer ticket para la final. Derrotó mediante un 22-13 a Andoni Sarasibar (Oberena). Pese a ser nueve tantos de diferencia dentro de la cancha no se avistó que podría llegar a tanto. Después de un comienzo óptimo para el navarro adelantándose con 3-0, una imprudente falta de saque dio alas a un Oihan que se marchó en el marcador para que ya él fuera quien dominara en todo momento ya que se situó con 8-3. Cabe destacar que el oiartzuarra no estuvo tan firme con la derecha pero con la izquierda si pudo hacer bastante daño. Es un golpeo muy potente que tiene y lo domina a la perfección con ambas posturas. Por ello, Etxeberria es un pelotari muy completo.
Aun así, Andoni iba a poder meterse en el marcador llegando hasta un 13-15 donde parecía que el partido podía estar más abierto. En los momentos clave cometió errores claros y un pelotari como Etxeberria eso no te lo perdona. Con lo cual, un parcial de 7-0 cerró el partido para el guipuzcoano. Además, en el 17-13, Sarasibar pegó un pelotazo, obviamente involuntario a su oponente en el brazo. Esa situación agravó más su estado y cayó a nivel psicológico dejando esa lucha que siempre le ha caracterizado. Se vio superado en esos tantos finales y Oihan Etxeberria después de ese 3-3, siempre fue por delante en el marcador.
En el envite por parejas, el triunfo fue para Eñaut Lizeaga (Mundarro) y Unax Landa (Oiarpe) que derrotaron por 22-17 a Jorge Fernández (San Cosme) y Unax Apeztegia (Oberena). Un encuentro en el que los guipuzcoanos dominaron desde el principio. Comenzaron muy concentrados demostrando su poder y queriendo tener siempre obligados a los rivales. Apeztegia tuvo que estar muy atrás en la cancha y atosigado con el golpeo de Landa y un Lizeaga que si estaba siendo el protagonista. Realizó tantos de mucha categoría, muchos de ellos validados por su potencia aunque también tuvo lugar la delicadeza del remate.
Abrieron un imponente hueco de 14-7 ya que con lo vivido en la cancha era una cifra abultada. Aun así, los partidos hay que cerrarlos y sobre todo Fernández pudo entrar más en juego para ser mayor protagonista. Realizó más ganchos y tuvo oportunidades después de sacar una pelota que les iba mejor y con el que Apeztegia podía estar más cercano al frontis. Además, Lizeaga iba a contribuir con varios errores claros además de que tuvo problemas físicos en sus gemelos.
Cuando la tensión se acercaba con Jorge y Unax asomándose a un peligrosísimo 16-19, Eñaut y Landa pudieron sacar casta para sumar esos tres últimos tantos. La volea de Lizeaga protagonizó tantos y pudieron pasar de un duelo muy controlado a sufrir a final. Sin embargo, como es conocido a dos pelotaris como Jorge y Apeztegia hay que enterrarles varias veces ya que sino son ellos los que te entierran.
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