Erik Jaka alcanzó los cuartos de final del campeonato Manomanista 2020 ante Joanes Bakaikoa para ganar por 22-20 y tener que citarse con Mikel Urrutikoetxea.
Más sueltos y con unas sensaciones idóneas, Bakaikoa dio comienzo el envite de octavos de final. Siempre peligroso en la luchas mano a mano hace dos temporadas, estaba moviendo la pelota a la perfección con mucha salida desde su mano, ante un Jaka que parecía tener agarrotadas las piernas y sus movimientos no estaban siendo nada buenos. Además, cometió bastantes errores.
El de Lizartza pudo frenar la tacada de tantos del navarro tras llegar al 2-9 y sacar su pelota a la cancha. Se fue desquitando poco a poco de aquella presión y la presencia era diferente por parte del guipuzcoano. Trabajo bien los tantos y comenzó a definir y encontrar huecos. El pelotari de Etxarri, y su botillero Apeztegia, decidieron parar el partido con un tiempo en el 4-9.
Con el partido teniendo que haber cogido otra dirección, los tantos estaban siendo largos y Erik lanzó un pelotazo a la chapa para que Bakaikoa rescatara su saque situándose con 10-5. Ninguno de los dos era claro dominador sobre la cancha, pero la renta cosechada por parte del pelotari de la empresa de Baiko era clara y llegó al primer descanso obligatorio al 12-5.
El de Lizartza estaba siendo muy forzado. Cada tanto estaba siendo un sacrilegio para él ante un Joanes que no cedía ningún mínimo de metro además de lanzar todas las pelotas con intención. Con el 14-6, el pelotari colorado volvió a parar el partido.
Un error de Bakaikoa queriendo hacer una dejada en el ancho desde la contracancha, dio un poco de respiro a Erik para poder coger el saque. Con el primer golpe comenzó a hacer bastante daño para posicionarse mejor a la hora del remate, y por primera vez en el envite, se llevó el primer tanto largo para poner en el electrónico el 11-14.
Las sensaciones habían cambiado, seguía la dureza, pero los golpes de Jaka cada vez tenían más intención y estaba consiguiendo hacer más daño. Con el 14-14 y con un parcial de 8-0, Bakaikoa se fue a la silla para reflexionar junto a Apeztegia.
Fueron 10 tantos los consecutivos por parte de Jaka hasta que cedió su saque pero rápidamente lo cogió para ponerse 17-15. Cada vez, el dominio del guipuzcoano iba a más siendo quién ponía la pieza definitiva durante todos los tantos encontrándose muy positivo a la hora del ataque. Se situó 18-15 para llegar al segundo descanso obligatorio.
El cansancio estaba haciendo mella en Joanes ya que a la hora de defender estaba cada vez más blando, y la frescura del inicio había desaparecido. Venía con un terrorífico parcial de 15-1, pero aun así, el de Etxarri no quiso dar su brazo a torcer y sumó el tanto 16 cuando a Jaka le faltaba uno. A falta de dureza, el partido sumó tensión gracias al tesón que ofrece Bakaikoa. Finalmente, el de Lizartza consiguió cerrar el envite.
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