Se llevaron a cabo las finales del torneo Dinastia Etxabe de Zumaia con Unai Amiano y Unax Landa alzándose con la txapela entre los Sub 23.
No hubo lugar para las sorpresas y la pareja que era la máxima favorita entre los sub 23 ganaron el Dinastia Etxabe de este año. Unai Amiano (Tolosa) y Unax Landa (Oiarpe) derrotaron por 22-10 a Beñat Apezetxea (Umore Ona) y Endika Santesteban (Irurtzun) por 22-10. Es la última txapela del de Irún antes de un debut que será en apenas 15 días.
No hubo partido en ningún momento durante la noche del jueves 28 de agosto en Zumaia con un 5-0 inicial y un 11-4 que rompió de lleno. Desde el comienzo la dinámica fue la dominadora por parte de los guipuzcoanos. Santesteban, también estuvo algo blando a la hora de restar los saques. Un Landa que abrió diferencias y un Amiano que supo aprovecharlas en modo de remate. Apezetxea, quiso enredar y se le nota enn forma, pero apenas dispuso de oportunidades para que eso se llevara a cabo. Cerca del final se le vio un bello remate con la izquierda después de defender. En líneas generales, un monólogo que se pronunció en modo de txapela.
Entre los juveniles, Harkaitz Murua (Intxurre) y Aitor Etxeberria (Oiarpe) fueron los campeones al vencer por 22-14 a Mikel Egurrola (Markina) y Eñaut Moto (Txukun Lakua). Una cita en la que los perdedores sucumbieron hasta 16 pelotas entre los dos aunque hasta el ecuador pudieron estar dentro de la final encontrándose con un 12-10. Una pareja que había mostrado ser muy segura y tener una tendencia de poder dominar bastantes tantos, fue la cara dispar de la moneda.
Murua y Etxeberria mostraron oficio donde en la primera parte, Harkaitz supo retrasar la pelota y atosigar más al zaguero alavés. Los delanteros iban a tener su protagonismo. La reacción de Egurrola-Moto les llevó a acercarse en el ecuador, pero nuevamente los guipuzcoanos volvieron a escaparse cosechando rentas de cada vez más distancia. Muchos errores fueron los que cayeron. Egurrola, quiso entrar en juego y también propició errores buscando esa ayuda a un zaguero que se vería dominado.
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